Risotto de hongos, setas y gambas

Los lunes son especialmente chungos para todo... empezamos la mañana con el recuerdo del fin de semana. Estamos más perezosos y sobretodo apetece poco currar, cocinar o cualquier cosa que tenga que realizar un esfuerzo mental... por lo menos para mi. Los hay que los lunes son estupendos y todo...

De todos modos, la cocina es distinta... a mi me apetece poco meterme un dia como hoy en ella, entre otras cosas porque tengo todos los platos de ayer domingo sucios en el fregadero y por cojones hay que limpiarlos... pero bueno, alargo el momento de entrar y se acabó.

Para hoy que mejor que un plato currado, de los que requieren atención pero que después de todo el esfuerzo, lo mejor es la hora de probarlo. ¡¡No querías chocolate, toma dos tazas!!.

Risotto de hongos, setas y gambas

Ingredientes:

• 250 grs de boletus
• 250 grs de champiñon salvaje
• 300 grs de gambón grande
  
• 300 grs de arroz arbóreo
• 1 cebolla
• 1 vaso de vino blanco seco
• 4 dientes de ajo
• 1 litro de fumet de pescado (si os sobró del otro día como a mi, usar ese)
• 1 cucharada de tomillo
• 2 cucharadas de perejil
• 100 gramos de queso parmesano
• pimienta negra
• aceite de oliva
• mantequilla
• sal

Preparación:

Lo primero que hay que hacer es lavar un poco el arroz, porque este tipo concretamente absorve mucha agua y suelta mucho almidón, que será el resultado del risotto, exquisito, en una palabra. Lo reservamos. Picamos bien el ajo y la cebolla y ponemos a calentar el fumet. También dejamos bien cortados los boletus y los champiñones, y bien lavaditos para que no haya tierra por medio.

Una vez tenemos todo listo, empezamos a cocinar. Lo primero echamos la mantequilla y un chorrito de aceite de oliva y añadimos el ajo y la cebolla para que vayan pochando. Una vez hecho esto, añadimos las setas y las salteamos también. Luego añadimos las gambas y aprovechamos para salpimentar un poco. Un par de minutos después es el momento de añadir el arroz y no dejamos de dar vueltas durante un par de minutos. Luego, pasado ese tiempo, añadimos el vino y dejamos que se absorva por completo. Añadimos el tomillo y bajamos el fuego. Vamos añadiendo el caldo de dos en dos cazos, siempre bien caliente. Ve dando vueltas sin parar al arroz y repite esta operación hasta que veas que el arroz está hecho y queda meloso pero no caldoso. Antes de que apagues el fuego, ralla el parmesano y añádelo al risotto, asi como el perejil, deja reposar el arroz unos minutos y luego está listo para comerlo.

Es un plato realmente delicioso. Ya me contareis que os ha parecido.